En un workshop realizado en el edificio de Ciencia y Tecnología de la Universidad Católica de Chile, la empresa Phineal presentó un nuevo e innovador sistema que permite medir los módulos fotovoltaicos con el fin de evaluar la reducción de la generación de energía, debido al envejecimiento en los más de 20 años de operación.

Este nuevo producto posee una plataforma en línea y una serie herramientas que permiten comparar y hacerle seguimiento a los paneles, detectar fallas, elaborar planes de mantenimiento y generar una base de datos de seguimiento histórico de cada módulo testeado. Con estos datos, las plantas fotovoltaicas en Chile pueden generar planes de acción para mejorar su eficiencia. El proyecto cuenta con el apoyo del Programa de Energía Solar de Corfo a través de la línea de validación y empaquetamiento tecnológico y es patrocinado por Dictuc de la Pontificia Universidad Católica de Chile.

Eduardo Soto, CEO de Phineal, explica que este sistema escalable posee una gran variedad de aplicaciones prácticas y de gran importancia para la industria fotovoltaica, ya que proporciona un registro de las curvas I-V de los módulos fotovoltaicos permitiendo probar en condiciones reales su desempeño. “La propuesta de valor de nuestra empresa es la creación de una herramienta que permite llevar un registro histórico de los módulos con el fin de analizar su comportamiento a lo largo de su vida útil. Además, es posible analizar los fenómenos de degradación para establecer las garantías con los fabricantes, evaluar las tasas de ensuciamiento debido al polvo, realizar un “benchmark” de diferentes tecnologías comparando las curvas I-V entre diferentes tecnologías y condiciones de operación, cuestión que es muy valorable en Chile y Latinoamérica debido a su gran variedad climática. Este sistema es muy versatil, ya que dentro de su gama de aplicaciones permite optimizar los costos de operación y mantenimiento de las plantas solares”, asegura.

En tanto, Rodrigo Escobar, Académico del Centro de Energía UC, Director Área Energía Solar de DICTUC y jefe del Diplomado en Energía Solar, sostiene que la mejor forma de apoyar a las empresas innovadoras, es generar una vinculación directa entre academia y empresas a través de experiencias prácticas enfocadas al desarrollo de productos y servicios para la industria fotovoltaica. Este tipo de equipamiento proviene principalmente de países con ecosistemas de alto nivel tecnológico, por lo tanto, es muy relevante incentivar este tipo de proyectos de manufactura avanzada en la industria solar. Además, el soporte técnico se realiza en forma local lo que reduce enormemente los costos de instalación y mantenimiento, sumado a la reducción de los tiempos de respuesta en la postventa por ser tecnología desarrollada en forma local.

Para la empresa, las energías renovables han llegado para quedarse y consolidarse. “Por eso nos hemos enfocado en desarrollar soluciones acorde al mercado, con la idea de que puedan competir tanto en precio como en tiempos de respuesta, pero con un enfoque particular: entregar una experiencia sencilla al usuario, algo que no es común en este ámbito”, señala Eduardo Soto.

Fuente: El Mostrador

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