Por Hernán de Solminihac, Jefe de Programa del Diplomado en Administración y Dirección de Proyectos.

Fuente: La Tercera – Pulso

Chile alcanza 30,2 vehículos por cada 100 habitantes, equivalente a más de 5,3 millones de vehículos. Bajo esas condiciones, la infraestructura vial ha experimentado una mayor demanda y deterioro, lo que deriva en más requerimientos de gestión y mantenimiento.

La gestión y mantención de la infraestructura vial es realizada con presencia de trabajadores, materiales y maquinarias. Estas labores pueden representar riesgos en las rutas, que sin un adecuado plan de seguridad y medidas de prevención pueden derivar en nuevos siniestros viales.

En este sentido, la elaboración de un plan de seguridad vial en zonas de trabajo requiere considerar la naturaleza del trabajo a realizar, el tiempo y la duración de su ejecución. También los efectos esperados sobre los usuarios de las vías, las posibles rutas alternativas y los modos de viaje.

Si bien existe información acerca de las áreas que se ven influenciadas y los impactos que pueden llegar a ocurrir en las zonas de trabajo viales, no hay bases de datos con registros sobre cantidad, alcance, duración, o afectados de siniestros, entre otras estadísticas.

El Centro Latinoamericano de Políticas Económicas y Sociales de la Universidad Católica (Clapes UC) acaba de publicar un documento sobre seguridad vial en las zonas de trabajo, con el fin de disminuir los riesgos de accidentes derivados de estas labores de mantención de infraestructura.

Entre las recomendaciones del estudio, destaca el desarrollo de un nuevo sistema de evaluación y adjudicación de proyectos, que considere la metodología que presenta el contratista para su intervención y diferenciar costos directos e indirectos. También un modelo que garantice un estándar mínimo de desempeño a nivel general y en locaciones particulares en que se observan condiciones adversas.

El análisis propone, además, revisar y actualizar los manuales y las guías utilizadas en el país para regular la seguridad vial en las zonas de trabajo. Esto ante el rápido avance de nuevas tecnologías y sistemas de información que pueden apoyar la seguridad de los trabajadores y usuarios de los caminos.

La seguridad vial debe ser una preocupación permanente de todos los involucrados: autoridades, usuarios y empresas. Pero una preocupación especial deben ser las áreas donde se estén realizando trabajos, porque sin una adecuada gestión, los viajes pueden transformarse en un nuevo foco de mayor accidentabilidad.