30 diciembre 2021
EDITORIAL
Claudia Halabí, Directora de Educación Profesional de Ingeniería UC.
Ph.D. en Economía, U. de Georgia. Ingeniero Comercial y Economista, U. de Chile.
Educación Profesional de la Escuela de Ingeniería UC capacitó durante 2021 a casi 6.000 profesionales en 200 programas formativos diferentes. Dentro de los estudiantes, 34% de ellos habitan en distintas regiones de Chile, y otro 5% en países como Perú, Guatemala, Honduras, Ecuador, México, Panamá, Paraguay y Uruguay. Con mucho orgullo, podemos asegurar que más del 90% de nuestros alumnos y alumnas nos recomiendan, y que hemos podido diversificar nuestra oferta, impartiendo cursos y diplomados de gran relevancia e impacto para el desarrollo económico y social de la región, en más de 20 áreas distintas de la ingeniería. Comenzaremos el 2022 con mucha energía y entusiasmo para seguir trabajando en esta línea, aportando, desde la ingeniería, en la formación de los profesionales que las organizaciones requieren y, al mismo tiempo, contribuyendo a la inserción y desarrollo de carrera exitosa de muchas personas.
Lo anterior, no hubiese sido posible sin un equipo de trabajo de más de 40 colaboradores (excluyendo a los profesores) que trabaja con energía y rigor para coordinar en forma efectiva estos esfuerzos, experimentando nuevos procesos e innovadores métodos de gestión, y asumiendo importantes riesgos, que no serían posible sin el apoyo mutuo que todos se brindan. Educación Profesional Ingeniería UC ha logrado una interacción virtuosa de sus funcionarios, donde el resultado es un todo muy superior a la suma de sus partes.
Daniel Coyle, exitoso consultor y autor de varios libros en temas de liderazgo y desempeño, explica de forma clara en su libro The Culture Code (elegido por Amazon dentro de los mejores libros de 2018) cómo trabajan los grupos exitosos y qué cultura se debe construir para incrementar la probabilidad de éxito. En su contexto, éxito se refiere a efectividad y felicidad.
En Educación Profesional Ingeniería UC ha prosperado una cultura organizacional que condensa los siguientes talentos, los que, según Coyle, posibilitan que el equipo sea eficiente en el logro de su misión:
1. Se han construido vínculos seguros de pertenencia e identidad: el grupo ha logrado sentirse como una familia que comparte un futuro.
2. Las personas que lo componen, incluso las jefaturas, han sido abiertas en mostrar su vulnerabilidad cuando asumen riesgos de diversas índoles.
3. Se han establecido propósitos y se comparten objetivos y valores.
Esta cultura no fue fácil de lograr. Hubo obstáculos, tropiezos e incluso caídas. Lograr que entre los equipos o áreas hubiera empatía y trabajo colaborativo tomó tiempo. El esfuerzo por parte de los primeros miembros del equipo, para ir construyendo una cultura robusta, en medio de múltiples incertidumbres fue consciente. Pero se logró, y hoy es muy importante seguirla alimentando y cuidando.
En Educación Profesional, la satisfacción de los tres talentos mencionados, nos ha desplazado a un lugar de trabajo de características positivas para cualquier organización, como seguridad, pertenencia, proximidad, autenticidad, interés, conexión, cooperación, energía, alegría, entretención y otras que, en nuestro caso, se traducen en muchas ganas de esforzarnos para brindarle el mejor servicio al estudiante, en todo sentido.
Probablemente, el resultado que conlleva el consolidar un equipo de trabajo que posea algo de la cultura que define Daniel Coyle en su libro, es extensible a otros tipos de actividades o sectores de la economía. Incluso, parece obvio que, si la cultura organizacional no acompaña, difícilmente se logran cumplir las altas expectativas que muchos empresarios o administradores poseen. Pero para lograr un cambio cultural con resultados significativos es necesario trabajar muy cuidadosamente, y con las personas apropiadas.
El 2022 continuaremos potenciando a este gran equipo tal que, en palabras de Daniel Coyle, se combinen nuestras habilidades en una mayor inteligencia, comprometidos con grupo de colaboradores que siga atreviéndose a innovar, para un país y una región que avance por medio de la educación y el trabajo. Esto último, es nuestra razón de existir.
