Fuente: El Mercurio
En la nota, Hernán de Solminihac, Jefe del Diplomado en Administración y Dirección de Proyectos habla sobre las cifras de aumento de productividad laboral durante la pandemia. Léela completa a continuación:
Mientras la productividad total de factores (PTF) retrocedió 5%, completando tres semestres consecutivos de caídas.
La actual crisis sanitaria que enfrenta Chile ha dejado severas consecuencias para la economía del país.
Durante el segundo trimestre de este año, el PIB experimentó una contracción que superó los dos dígitos. Pero además, esta caída del producto ha conllevado que los niveles de ocupación hayan retrocedido en cientos de miles de puestos de trabajo en lo que va del presente ejercicio.
Así, en medio de este escenario adverso para la economía nacional, de acuerdo con un informe elaborado por Clapes UC, la productividad media laboral (PMeL) marcó un alza de 7,3% en el segundo trimestre de este año respecto de igual periodo del 2019.
Lo anterior, con un PIB que cayó 14,1%, y un empleo que marcó un retroceso de 20%. El incremento es el más alto desde el cuarto trimestre de 1997, cuando este indicador creció 7,5%.
Hernán de Solminihac, director del centro de estudios, explica que la PMeL se calcula como el cociente entre el PIB generado y el número de trabajadores que lo generaron y se compara con el mismo periodo (trimestre) del año previo. En el segundo trimestre de este año hubo una importante variación a la baja en ambas variables (numerador y denominador). “Sin embargo, el denominador (número de trabajadores) tuvo una caída mayor, por lo tanto, el resultado del cociente crece”, explica.
En términos sencillos, agrega, este trimestre el cociente (PMeL) fue mayor porque el número de trabajadores (denominador) disminuyó en mayor proporción que el PIB (numerador). “Básicamente sabemos que la pandemia y el confinamiento producto de las medidas de cuarentena impactaron en el PIB y en la reducción del número de trabajadores empleados”, complementa De Solminihac.
Pero, además, el académico advierte que es incorrecto decir “menos trabajadores hicieron la misma producción (o similar)”. “Lo que pasó es que menos trabajadores produjeron menos, pero la caída no es proporcional”, remarca.
Con todo, la PMeL del sector minero experimentó un crecimiento de 27,6% en el periodo. El informe de Clapes explica que este avance implica que esta industria contribuyó en 2,61 puntos porcentuales a la variación de la PMeL agregada. Por otra parte, los sectores de transporte y telecomunicaciones, y comercio, restaurantes y hoteles contribuyeron negativamente a la PMeL agregada con caídas de 0,24 y 0,96% puntos porcentuales, respectivamente.
Desde fines de julio, profundizándose en agosto, el país comenzó un proceso de desconfinamiento. Situación que ha llevado a que la actividad se comience a retomar y el empleo, aunque de forma lenta, se empiece a recuperar. Esto será parte del contexto de los próximos registros de productividad laboral.
En este contexto, ¿el registro del segundo trimestre será sostenible en el tiempo? Hernán de Solminihac observa que al considerar las actuales condiciones y el escenario de desconfinamiento (sin tener en cuenta un rebrote), se espera que el producto (PIB) comience a recuperarse. Esto significa que si el segundo trimestre el PIB cayó 14,1%, para el tercer trimestre la baja será un poco menor y para el cuarto trimestre será aún menor.
“No obstante, la recuperación del empleo será más lenta, pudiendo incluso mantenerse (la caída en la ocupación) en los dos dígitos al término de año”, señala. Así, este efecto de recuperación a distintas velocidades de la producción y el empleo provocará que la PMeL (cociente entre ambos factores) mantenga incrementos (cifras positivas) durante los próximos trimestres, por lo que podría ser un efecto duradero durante lo que queda del año.
Productividad total de factores se desploma
Otro indicador que elabora y mide Clapes UC es la productividad total de factores (PTF). Durante el periodo comprendido entre abril y junio, este índice retrocedió 5% respecto de igual lapso del año pasado. De esta manera, la PTF marcó su mayor caída desde 2009, en plena crisis financiera global.
Hernán de Solminihac manifiesta que el cálculo de la PTF se puede entender de la siguiente forma: La baja en el empleo (20%) explicaría 10,3 puntos porcentuales de caída en el PIB, mientras que el aumento de 2,8% del stock de capital justificaría un aumento de 1,3 puntos porcentuales en el PIB. “La suma de las contribuciones de estos dos factores (empleo y capital) explicaría solo 9 puntos de los 14 que cayó el PIB durante el segundo trimestre. Los cinco puntos restantes obedecerían a una baja de la productividad (PTF)”, señala.
Y agrega: “Lo anterior puede deberse a que la condiciones de funcionamiento para quienes quedaron produciendo fueron más complejas, con más interrupciones, más trámites y demoras”.